Ingredientes: para cinco pizzas grandes

– 675 gr de harina (yo he utilizado una orgánica de fuerza)
– 15 gr de levadura de panadero
– 330 gr de agua con gas
– 15 gr de sal
– 30 gr de aceite extra virgen
– 1 c/p de azúcar

– Jamón ibérico cortado muy fino
– Queso de cabra
– Rúcula
– Salsa de tomate

Para la salsa de tomate:
– 5 tomates maduros o una lata de tomate natural triturado
– 2 dientes de ajo
– 4 hojas de albahaca

Elaboración
Si no tenemos salsa de tomate hecha, la hacemos laminando los ajos y dorándolos en un poco de aceite.
Cuando cojan color añadir el tomate, dejar que se evapore el agua y reduzca. Añadir las hojas de albahaca cortadas a mano. Añadir una pizca de azúcar.
Cuando tenga la consistencia que queramos, rectificar con sal y reservar.

Para la masa:
En un vaso ponemos un poco de agua (1/2 vaso) templada, añadimos el azúcar y la levadura. Reservar.
En un bol, añadir la harina haciendo un volcán en el centro, e ir añadiendo el agua con gas poco a poco e ir mezclando con la harina.
Añadir la mezcla de la levadura del vaso, el aceite y la sal. Ir mezclando hasta que quede una masa que no se pegue a los dedos demasiado.
Traspasar esta masa a una superficie lisa, limpia y enharinada para proceder al amasado. Amasar hasta que quede la masa elástica, sin grumos y que no se pega ni en los dedos ni en la superficie.
Hacer una bola con la masa y dejar reporsar en un bol donde pueda crecer y en un sitio seco y fresco, tapado con un trapo, durante 4 h.
Pasado este tiempo, volver a amasar para quitar el aire y dividir en 5 pequeñas bolas.
Ir amasando una a una en forma circular.
Cuando tengamos las bases, poner una capa fina de salsa de tomate y encima los ingredientes. En mi caso el queso de cabra y el jamón.
Poner en el horno precalentado a 180º, durante 20min. Servir con rúcula y parmesano encima.
Disfrutad!