Parece que haga una eternidad que no me ponía delante del ordenador para escribir en este rinconcito… Es increíble, que en un mes hayan pasado tantas cosas y que tenga la sensación de que han pasado cuatro, por lo menos….

Es buena señal, verdad? Durante unas semanas no he tenido consciencia de en qué día vivía ni qué hora era ni cuando se suponía que tenía que volver…

Iniciamos nuevo curso, nueva etapa y nuevo mes, con nostalgia por la finalización del verano, pero con alegría por todos los nuevos proyectos que asoman, se amontonan y pelean en la agenda por tener un lugar de preferencia. 

El mes de septiembre siempre es una mezcla de sensaciones. Por un lado es mi cumpleaños, de hecho, fue el día 5, mal día cuando eres niña y todos tus amiguitos están todavía de vacaciones y es imposible hacer una fiesta… Por otro lado,  los días se van acortando y la luz que hasta hace nada te iluminaba a las 21h ahora ha desaparecido por completo, para dar lugar a un cielo ya oscuro y con algo de suerte, estrellado.

Lo bueno, es que es un nuevo inicio de temporada, tiempo para renovarse después de estos días de relax y un nueva oportunidad para los buenos propósitos y excitantes proyectos. 

Este verano he podido disfrutar de unos días en una tierra que tenía unas ganas terribles de conocer: México. Ha sido una experiencia fantástica y he disfrutado de lo lindo. Un destino totalmente recomendable para ir en pareja, con amigos o en familia.

El único punto negativo ha sido la mala elección de hotel (bueno, elección tampoco porque era la única posibilidad que daba el TTOO).

Nunca había tenido la necesidad de pasar días fuera de un resort. No voy a entrar en detalles ya que la reclamación está realizada, pero si vais a México, por favor, no os hospedéis en el BlueBay Grand Esmeralda. No es ni de lejos una muestra de la amabilidad y el trato del pueblo mexicano, estoy segura.

Después de esta desconexión que tanto necesitaba, toca ponerse las pilas, poner al día la agenda y empezar con energías renovadas. Eso sí, sin dejar de soñar. 

Espero que hayáis disfrutado de vuestras vacaciones. Qué habéis hecho? Habéis podido desconectar?